martes, 18 de noviembre de 2014

Fuerza, valor y lagrimas

Sentir que la vida se escapa entre la comisura de los labios, que cada aliento es el último, que las fuerzas se están agotando… De golpe, las ansias de luchar invaden tu cuerpo, una fuerza inhumana que no quiere que tu vida deje de latir tan rápido. De pronto la vida cambia. A pesar de las dificultades decides levantarte de la cama, salir de casa y dejar que el sol te despeine las ideas, te seque las lagrimas. Tú decides quien gana y no es cuestión de perder esta partida.  Debes luchar con todas tus fuerzas y disfrutar cada guiño de ojos que te da la vida. Hacer que tu vida no se limite a sentir miedo a perder las alas, si no, emprender el vuelo cada mañana. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario